Nada arruina el chapuzón en la piscina como el agua turbia. Afortunadamente, no necesitas ser un experto en química para devolverle la claridad y el brillo a tu oasis de verano. Aquí te traemos algunos consejos prácticos para combatir ese problema y volver a disfrutar de aguas cristalinas.
Consejos para el agua turbia de tu piscina
En PS Cover, contamos con años de experiencia en el mundo de las piscinas. Si quieres eliminar y hacer una prevención profesional no dudes en seguir los consejos que te proporcionamos a continuación:
- Diagnóstico primordial: antes de lanzarte a la acción, es importante determinar la causa de la turbidez. Puede deberse a un desequilibrio químico, falta de filtración, o incluso la presencia de algas. Un análisis inicial te ayudará a encontrar la raíz del problema.
- La química del equilibrio: mantén un ojo en los niveles de pH, cloro y alcalinidad. Ajusta estos parámetros según las recomendaciones del fabricante y realiza pruebas periódicas para mantener el equilibrio químico. Un agua con un buen balance es menos propensa a la turbidez.
- Filtración efectiva: una filtración adecuada es esencial. Limpia o reemplaza los filtros según las indicaciones del fabricante y asegúrate de que funcionen correctamente. A veces, un filtro obstruido es la causa de la turbidez.
- Cloro y floculante: si la turbidez persiste, considera un “shock” de cloro para eliminar bacterias y algas. Luego, usa un floculante para hacer que las partículas suspendidas se agrupen y se depositen en el fondo. Luego, aspira con cuidado el sedimento.
- La paciencia es clave: recuerda que a veces llevará tiempo restaurar la claridad completa del agua. Sé paciente y sigue monitoreando los niveles químicos y la filtración.
Desventajas de tener agua turbia en tu piscina: más que un problema estético
El agua turbia puede ser un caldo de cultivo para bacterias, algas y microorganismos no deseados. Nadar en agua contaminada aumenta el riesgo de infecciones, irritaciones en la piel, ojos rojos y problemas de salud, especialmente en niños y personas con sistemas inmunológicos debilitados. Por otra parte, no es atractiva ni acogedora. La falta de claridad y limpieza puede disminuir significativamente el disfrute y la relajación que deberías obtener de tu piscina, convirtiendo un oasis en un lugar menos atractivo para relajarte.
La falta de visibilidad en el agua turbia hace que sea más difícil nadar con seguridad. Esto es especialmente preocupante si tienes niños en la piscina, ya que puede ser difícil supervisarlos adecuadamente. Combatir la turbidez del agua puede resultar en costes adicionales. Deberás comprar productos químicos y equipos de filtración adicionales, lo que puede aumentar tus gastos de mantenimiento.
Restaurar la claridad del agua turbia lleva tiempo y esfuerzo. Requiere un diagnóstico adecuado, ajustes químicos, limpieza y mantenimiento constantes. Este proceso puede ser frustrante y quitar tiempo que podrías dedicar a disfrutar de tu piscina.
Problemas de salud asociados al agua turbia de la piscina
El agua turbia puede contener irritantes químicos, bacterias y otros contaminantes que causan irritación de la piel y los ojos. Los bañistas pueden experimentar picazón, enrojecimiento y molestias que pueden arruinar la diversión en la piscina. La exposición prolongada al agua turbia también puede llevar a problemas respiratorios, especialmente en personas con condiciones preexistentes como asma. Los contaminantes en el agua pueden liberar vapores que afectan la salud pulmonar y desencadenar síntomas respiratorios.
Si quieres evitar este tipo de problemas y tener un piscina perfecta, no dudes en ponerte en contacto con nosotros.
